Para este lunes se prevé que el Tribunal de Penas de la Liga de Fútbol de Mercedes haga entrega de informe con las actuaciones referidas a la denuncia de intento de soborno por parte de un dirigente de Bristol al árbitro José Luis Sierra, en lo previo al segundo partido final por el título de la temporada entre los bophemios y Sud América.

De acuerdo a la información que @gesor ha podido recabar, en las gestiones ante la Justicia y autoridades locales de Casinos del Estado, no fue posible contar con copia de la filmación realizada en la cámara del frente del local de Casinos en el Centro de Mercedes, en el caso de la Justicia, el Dr. Marcelo Souto la negó en virtud que el expediente se encuentra en etapa de pre sumario y en lo que refiere al gerente local de Casinos informó que ese tipo de solicitudes deben gestionarse a través de la Justicia. Tampoco se cuenta con informe oficial de la empresa de servicio de celular del árbitro a los efectos de conocer mayores detalles de la llamada previa que concertó el encuentro entre el árbitro y el dirigente.

A raíz de esto, seguramente el Tribunal no llegue a pronunciarse sobre el tema de fondo, en el sentido que solamente cuenta con las declaraciones de los involucrados, cada uno dando su versión, es decir que no cuenta con todos los elementos para poder emitir un fallo afirmando que efectivamente ocurrió lo denunciado o que ello no fue así, en concreto no puede afirmar ni negar lo denunciado, sino que tuvo todos los elementos necesarios para fallar en uno de esos sentidos.

De confirmarse ello, cuando el informe ingrese a la sesión del Consejo Directivo, allí podría tener otras derivaciones, esto es, si alguna institución o neutral plantea que lo ocurrido es un hecho de carácter grave, deberá convencer de ello al resto de los integrantes del consejo y eventualmente conseguir 10 de los 15 votos que tiene el órgano de conducción de la LIga para adoptar una decisión ejemplarizante como la que reclama Sud América. Ello podría pasar por la suspensión de afiliación o desafiliación directa, y hoy las posiciones están divididas, y ambas instituciones involucradas han mantenido diálogo con algunas de sus pares tratando de conseguir el apoyo necesario a su posición en el tema.

Es un tema muy complejo y de difícil resolución en cuanto a las medidas que pretende llegarse por parte de algunos, porque tampoco se cuenta con los elementos necesarios para tomar una posición de declaración de hecho grave o no y lo que se busca -tal parece visto desde afuera- es asumir lo que el Tribunal no hizo, es decir fallar por convicción moral, o sea tomar posición por convencimiento de lo que eventualmente ocurrió, al no tener las pruebas materiales de ello.

Ante una eventual suspensión de afiliación, que podría plantearse por un período de dos a tres meses, el bohemio perdería el campeonato y no podría participar del período de pases de febrero, en ese caso el encuentro o encuentros pendiente/s del Repechaje entre Con Los Mismos Colores y Nacional debería/n jugarse, Sud América sería campeón sin jugar.

Si lo que se plantea y obtiene los votos necesarios es la desafiliación directa de los bohemios, éste descendería a la "B", podría pedir el reingreso a la Liga en enero y de aprobarse regresar por la divisional de ascenso y ello modificaría la definición del Repechaje ya habría que anular el juego entre CLMC y Nacional definiendo el Repechaje Nacional con Asencio y en cuanto al título, los naranjitas serían los campeones sin jugar.

La tercera posibilidad es que a pesar que surja ese pedido de calificación de hecho grave (o no) pero no se alcancen los votos necesarios, la Mesa de la Liga se verá obligada a fijar el segundo encuentro por el título del año antre Bristol y Sud América y allí habrá que ver si los buzones cumplen con el anuncio de no presentarse a jugarlo, por lo cual Bristol sería el campeón sin jugar y el Repechaje entre CLMC y Nacional debe jugarse tal cual.

Así estás dadas las cosas a este lunes, que puede ser día en que comiencen a darse definiciones sobre este complejo y delicado tema, que sin dudas ha dejado sobre el fútbol mercedario el peor lastre que podría tenerse, el de la falta de credibilidad en que no haya influencia extra a lo futbolístico y es allí donde todas las instituciones y los neutrales tendrán que poner énfasis, para recuperarla.