A veces mis pupilas lloran las lágrimas de mi madre.
Aprendí de su dolor a fingir la sonrisa, fantasía de felicidad en los labios de su alma dolida. 
Como ella, muchas mujeres aún hoy, fingen sonrisas... mujeres postergadas de una vida digna.
Desde el inicio de la civilización la mujer ha sido tratada como objeto por los hombres. 
Desde la Babilonia que es lo que tenemos como referencia más antigua en las páginas de la historia, hasta la actualidad el poder patriarcal pretende resumir el papel de la mujer dentro de las cuatro paredes del hogar.
Hasta cuándo el patriarcado, el Estado machista y gran parte de la sociedad las seguirá explotando y tratándolas como si fueran un mero objeto.
Inclusive han conseguido separar sus luchas y las reivindicaciones.
Hoy muchachas, reivindiquen sólo derechos, porque para hablar de violencia hacia las mujeres, el "NI UNA MENOS" el calendario gregoriano les reservó otro día.
Quizá mi ignorancia no consiga separar los hechos, porque para mí, no es una lucha de género, es una lucha de conciencia de clase a la que pertenezco.
Como si fuera posible ignorar en el día de hoy, a las víctimas de la violencia física, las torturas y los asesinatos hacia las mujeres.
Perdón, a veces mis pupilas confunden las luchas y lloran las lágrimas de todas las mujeres...
El almanaque indica el 8 de Marzo Día Internacional de la Mujer Trabajadora, recordando aquellas obreras de la fábrica textil asesinadas por el patrón.
Exijan salarios dignos para iguales trabajos, más derechos y condiciones laborales, leyes que las protejan de los abusos de los patrones.
Por eso, hace mucho tiempo que ya no me permito fingir la sonrisa.
Hace mucho tiempo que deberíamos haber enterrado el patriarcado, el Estado machista, el sistema y parte de esa sociedad que desprecia a nuestras mujeres.
La hipocresía y la burocracia le destinaron sólo un día para ellas.
Pero hacen falta leyes, condenas y políticas de Estado para que las protejan todos los días del año.
Esa protección que no tuvo mi madre, y aún no tienen la mayorías de ellas.
Hoy mis pupilas se indignan y lloran las lágrimas de todas las mujeres.
Hoy, mañana y siempre, sus luchas serán mis luchas.
Violencia, acoso e indiferencia hacia las mujeres, nunca más pueden ser permitidas.
Exijamos y gritemos en coro todos juntos:
¡¡No es un día de festejos, es un día de reconocer derechos!!
Para que nunca más las mujeres tengan que sufrir acosos, llorar, ni fingir sonrisas...
A las mujeres que luchan y no se rinden.
¡¡Mi admiración y respeto!!

Artigas Osores

Ilustración Mix