(por Martín Corujo) Con el propósito de profundizar el flagelo que en los últimos días ha venido afectando seriamente a la sociedad mercedaria, @gesor optó por consultar a la Encargada de la Unidad Especializada en Violencia Doméstica (UEVD), Subcomisaria Silvina Cordero, dependiente de la Jefatura de Policía de Soriano. En este sentido, los conceptos fueron claros a la hora de abordar una realidad que toca directamente a un número importante de familias sorianenses, ayudando dicha entrevista a despejar dudas al momento de poner en conocimiento a la Policía de situaciones que muchas veces quedan en la interna de una familia o de la vencidad, pero que a causa de ello puede agravarse la problemática por no darse paso a quienes podrían transitar por el camino de la solución. Cabe destacar que la Unidad Especializada en Violencia Doméstica funciona en sus instalaciones de calle Rodó esquina 18 de Julio de la ciudad de Mercedes.

¿Como ha tomado la Policía la seguidilla de hechos de violencia doméstica suscitada en los últimos días?

"Lamentablemente es algo común y corriente, algo que ocurre todos los días, tenemos muchas denuncias de casos de violencia doméstica. Sí ha tomado más notoriedad públicamente por los procesamientos que hubo, pero es una triste realidad, es un trabajo diario recibir denuncias, el indagar personas, y estos casos terminaron con buen resultado porque las pruebas remitidas a la justicia y el trabajo judicial llevaron al procesamiento de todas las personas". 

¿Para aclarar los hechos primó la colaboración de familiares, de vecinos, o de las propias víctimas en algunos de los casos?

"Sí, es un conjunto de cosas. Pero también hay que destacar que en los últimos casos se tuvo la colaboración de testigos. Porque sabemos que los temas de violencia doméstica a veces son de público conocimiento, pero la sociedad toda tiene como miedo de inmiscuirse en estos asuntos porque tienen temor a las represalias, o que luego la víctima vuelva con su victimario, y a veces son renuentes en prestar su declaración. En estos últimos casos, hemos tenido la colaboración de vecinos y allegados y todo tipo de personas que conocían esta situación y lo hicieron saber viniendo a la Unidad Especializada en Violencia Doméstica (UEVD) o en forma anónima que es a lo que siempre instamos a quien sepa de algún hechos de violencia doméstica, así tenga la presunción y no pueda comprobarlo, que igualmente se acerque a la Unidad o llame vía telefónica, si no quiere aportar sus datos también lo puede hacer en forma anónima, para nosotros es de vital importancia, y para esa víctima también, que de repente puede ser rescatada y puede ser el apoyo que necesita para animarse a realizar una denuncia".

¿A la policía le resulta difícil establecer el perfil de la persona acusada, ya sea al marcarla como victimario o como persona violenta de toda la vida?

"El perfil uno lo hace en el momento. O sea, quienes trabajamos en violencia doméstica tenemos la capacitación necesaria y especialización en esta temática. Tenemos que definir cual es el perfil de la victima, definir el perfil del agresor, y con los relatos que allí surjan tanto de la víctima como de otros testigos, o del mismo agresor, nos permita realizar una evaluación de riesgo, y también tratar de ilustrar en qué situación se encuentra la persona, permitiéndonos llegar al ciclo que nosotros llamamos el Ciclo de la Violencia. Entonces, y haciendo el perfil adecuado uno puede ir asesorando a la persona sobre los pasos siguientes que pueden llegar a presentarse. Tenemos que hacer un perfil, eso que no es válido como prueba, porque de eso se van a encargar los sicólogos o los técnicos para brindar las pruebas necesarias a la justicia. Ese punto para nosotros es muy importante en cuanto a la víctima, para el fortalecimiento, porque muchas veces la víctima no sabe en qué situación está, o no se reconoce a sí misma como víctima de violencia. Muchas veces llega por impulso de los familiares a realizar una denuncia, pero siempre existe esa culpa o esa verguenza por haber permitido que esa situación haya llegado a esos límites, o ya cuando el ciclo es muy cerrado siempre la culpa la siente la víctima, pensando que ha hecho algo para merecer el comportamiento que tenga el victimario".

¿A partir de la constatación de una situación de violencia doméstica, qué pasos cumple la Policía? ¿Cuando se da pie al Poder Judicial para poder continuar con las actuaciones?

"Ante el conocimiento de la situación, por cualquier medio, ya sea por la persona que venga a presentar una denuncia o cualquiera sea la manera en que se recibe la noticia, primero se trata de establecer que la persona que es víctima de violencia doméstica, si no quiere hacer una denuncia hay que tratar de salvaguardar su integridad. Hay que buscar la manera de tener un diálogo con ella, de fortalecerla y de asesorarla en el lugar donde está. Luego de tener su testimonio, se tiene que llamar si o si al victimario (dependiendo el caso), porque también debemos dar garantías al tomarle la declaración, acá son muy importantes los testigos, por lo general la persona acusada siempre va a negar. Y cuando no existe violencia física se muy difícil comprobar la violencia sicológica, que es la violencia más tenemos estadísticamente. 

Entonces, allí es de vital importancia contar con otras personas que puedan aportar algo, para darle luz a la investigación. Depende de cada caso, si ha existido la colaboración de algún técnico, ya sea de forma particular (Sicólogo, Asistente Social), tratamos de comunicarnos con ellos para ver de qué manera pueden dar algún tipo de información, respetando siempre el secreto profesional. Recibimos mucho apoyo de distintas instituciones; ya sea el Mides, los Caifs, las Escuelas que tienen también sus técnicos, de esa nos retroalimentamos de la información que pueda haber, para tratar el máximo de pruebas a la justicia para que pueda tomar una resolución. Igualmente en estos casos, al primer Juez que tenemos que enterar de la situación, es al del Juzgado de Familia que siempre impone una medida cautelar".

Convengamos que desde la sana ignorancia muchas veces la gente culpa a la Policía o a  la Justicia, y en distintas oportunidades hablamos de situaciones graves o de muerte, en las cuales los investigadores deben reunir muchos elementos para cerrar una investigación. Por eso, ¿a la Policía como le cae que en reiteradas ocasiones se hable con desconocimiento de la situación?

"Es muy difícil y es una realidad que va a llevar mucho tiempo para que se deje de pensar que la culpa puede ser de la Policía o de la Justicia. A veces hay un poco de falta de conocimiento en la población, porque toda persona en nuestra legislatura necesita y le debemos garantizar el debido proceso. Más allá de que uno siempre toma como verdadero de que hay que creerle a la víctima, necesitamos reunir las pruebas para brindarle a la justicia y para que tome las medidas pertinentes con ese victimario o victimaria, que obviamente va a apelar a que es inocente a las cosas que le imputan. Por ahí se conoce la "palabra contra palabra" y no podemos pretender que la justicia, si no tiene  pruebas, se vuelque hacia una de las partes, porque debe ser objetiva. Entonces, ese es el trabajo policial, el de entregar las pruebas para que a esa objetividad no la pierda la justicia y se pueda avanzar empíricamente en las pruebas que uno les de. Y muchas veces llegamos a obtener esas pruebas a través de los testimonios".

¿Desde la ésfera policial se cree que el temor ha ido quedando atrás? Porque muchas veces no se denuncia para no quedar expuesto frente al acusado. Entonces, ¿que mensaje se puede dar a la comunidad a los efectos de transmitir seguridad y respaldo al denunciante? 

"Más allá de que resulte entendible el miedo que pueda tener el ciudadano, uno tiene que pensar que puede estar salvándole la vida a una o más personas. A veces no es tanto el miedo por las represalias, sino el malestar de tener que pasar horas en una comisaría o en una sede judicial. Siempre hay que tener en cuenta que del otro lado está la vida de una persona. No solo pensar que le salvamos la vida para que no la maten, sino que le damos calidad de vida. Porque si uno sabe de una situación y no quiere denunciar-sea cual sea el temor- entonces esa persona va a seguir viviendo esos hechos de violencia que se van a ir agravando día a día. Por otra parte, tratamos de hacerle llegar a la población que se puede denunciar de forma anónima. Así como está el 911, que no le va pedir los datos, más allá de que el 911 entable una comunicación y sepa quien lo está llamando, en ningún momento le brinda a la seccional los datos de la persona que realizó la llamada. Por eso es de vital importancia denunciar al 911, a la seccional o a cualquier lugar, por favor pidan quedar en el anonimato que se le va a respetar, porque lo que uno necesita es conocer la situación. Nos ha pasado muchas veces, en casos de gravedad, que uno concurre, no se tienen registros en la Unidad, ni en ninguna seccional, pero sí el entorno sabía de la problemática y piensa a divulgar que esta situación era conocida, pero resulta que era conocida por ellos, pero no por la autoridad policial". 

¿En casos de violencia doméstica que peso pueden tener los celos, el consumo de alcohol y el efecto de las drogas?

Puede ser que agraven la situación, pero no son condicionantes de que por ese hecho existan hechos de violencia doméstica. No toda persona que es alcohólica o abusa de sustancias necesariamente ejerce violencia doméstica. Quien ejerce violencia doméstica ya tiene ese perfil, puede haber sido víctima cuando niño y repercutirlo cuando grande, pero no necesariamente todas las víctimas de violencia llegan a ser victimarios en un futuro. Ya es una condición y un perfil que tiene la persona, el victimario en violencia doméstica tiene a su víctima ya determinada y la acción va a ir directamente, con ese abuso de poder, que culturalmente ese poder se le ha dado al hombre, que es el jefe de familia. Y ese abuso de poder hace que a la misma vez le brinde una cara totalmente antagónica al resto de su entorno, por lo general el victimario no es visto como tal, ni en su familia ni en su entorno social, solo lo conoce verdaderamente su víctima". 

¿Que ha pasado con el registro de denuncias por violencia doméstica, se ha mantenido o se ha elevado?

Sí, se va elevando, cada vez más y a pasos agigantados. Pero es conveniente decir que, si bien en estos últimos tiempos hemos tenido hechos que lamentar en Mercedes, los números van subiendo gracias a toda la difusión que ha tenido esta temática, tanto en Soriano como en todo el Uruguay. Y la gente se está animando a denunciar más, no es que existan más casos de violencia doméstica, sino que la gente ahora se está animando a denunciar.