En el Ministerio de Salud Pública, fue presentada una guía para la asistencia y tratamiento de las personas con epilepsia dirigida al personal de salud en el primer nivel de atención. Incorpora actualización de los datos disponibles, novedades farmacológicas, y referidas al Programa Integral de Cirugía de Epilepsia, que es financiado por el Fondo Nacional de Recursos.

El acto, que coincide con la conmemoración del Día Latinoamericano de la Epilepsia, fue presenciado por el titular del Ministerio de Salud Pública, Daniel Salinas; el director general de esa secretaría estatal, Miguel Asqueta, y el director del Programa de Salud Cerebral, Ignacio Amorín.

Salinas explicó que se trata de una actualización, desde el punto de vista científico clínico que no se realizaba desde hacía 10 años, y que se basa en tres pilares: la Cátedra de Neurología de la Facultad de Medicina de la Universidad de la República, la Liga Uruguaya contra la Epilepsia y la Asociación Uruguaya de Pacientes con Epilepsia.

Agregó que contiene un trabajo acumulado, honorario en muchos casos, de profundización de conocimiento científico sobre la epilepsia, una enfermedad que en Uruguay padecen unas 39.000 personas.

El ministro destacó la importancia de un programa de prevención y de buenas prácticas para el tratamiento que abren el camino para la investigación clínica.

Por su parte, Amorín explicó que la recopilación incorpora novedades científicas para difundir entre los médicos generales del primer nivel de atención, a fin de que puedan aplicarlas al atender a sus pacientes. Añadió que coincide con la voluntad de fortalecer la atención de ese nivel, lo que, según valoró, representa “un enfoque fundamental desde la Dirección Nacional de Salud que el Ministerio de Salud Pública se ha impuesto”.

El director explicó que la publicación contiene novedades farmacológicas y una actualización referida al Programa Integral de Cirugía de Epilepsia, que es financiado por el Fondo Nacional de Recursos (FNR).

En relación con el acceso a los tratamientos, afirmó que la cobertura en Uruguay es buena, aunque dijo que se deben mejorar aspectos vinculados con la prevención. Indicó que los pacientes acceden a terapias farmacológicas, como también a intervenciones quirúrgicas. Añadió que la cirugía se reserva para los casos de epilepsia refractaria, denominación que reciben porque no responden a altas dosis de diferentes fármacos antiepilépticos.

Formas de prevención de la epilepsia

Amorín explicó que, según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), 1 de cada 4 pacientes epilépticos podría haber prevenido su condición. Mencionó el caso de la epilepsia vascular, de la que se puede reducir la incidencia si se disminuyen los accidentes cardiovasculares (ACV). En ese sentido, anunció que el ministerio prepara para octubre un plan nacional de abordaje del ACV.

También destacó que reducir la siniestralidad vial redunda en una disminución de la denominada epilepsia traumática, derivada de una lesión en el cerebro provocada por un accidente. Otra medida consiste en mejorar la atención de recién nacidos, para prevenir la epilepsia relacionada con lesiones perinatales, según agregó.

Resumió que, mediante una serie de prácticas recomendadas por los organismos internacionales que potenciará el ministerio, se podrá reducir esta patología, que afecta a 1,14% de la población uruguaya.