Acaba de hacerse pública la lista de los Jefes de Policía de los 19 departamentos, que comenzarán el mandato junto con el nuevo Gobierno Nacional y desde @gesor entendemos oportuno, exponer sobre un tema sensible para la población de Soriano, más allá de la sana discrepancia que pueda existir, lo hacemos desde el conocimiento diario de una gestión por nuestra periodística. El Crio. Gral. (r) Alberto González ya no será el Jefe de Soriano y su lugar pasará a ser ocupado por el Crio. May. William Martínez.
Más allá que se trata de cargos de confianza, consideramos que en la línea trazada por el propio furuto Ministro del Interior Jorge Larrañaga, de no tocar lo que está bien, el Jefe González debió permanecer en el cargo en Soriano para consolidar una gestión que es avalada por los números, pero también por la propia población. Cuando consultamos a gente allegada a las futuras autoridades ministeriales sobre las razones para el cambio se reconoce y valora la gestión de Alberto González entre las mejores del país y precisamente en esa mirada país es que se le otorga el destino de Artigas teniendo en cuenta que es uno de los departamentos complicados en materia policial y se necesita allí dar un impulso a la gestión.

LAS CIFRAS EN LOS DELITOS
En lo que concierne a las rapiñas, cabe señalar que cuando asumió el Jefe Alberto González en marzo de 2016, venía de un año, el anterior, es decir 2015, en que se habían registrado 73 denuncias, y en el 2016 esa cantidad bajó en el primer año de gestión de González a 63, en el 2017 siguió descendiendo algo más ubicándose en 60 denuncias, en el 2018 creció a 70 cuando fue la ola a nivel nacional y al cierre del 2019 volvió a descender situándose en 66 denuncias.
En cuanto a los hurtos en el 2015 eran 1.957 las denuncias, en el 2016 se ubicaron en 2.014 y desde allí ha venido descendiendo en los años posteriores, situándose 1.817 en 2017, y en 1.797 en 2018, cerrando el 2019 con 1.743 denuncias.
En estos dos items corresponde hacer una precisión, que quienes seguimos el tema policial planteamos en su momento inclusive fue tema en algunas de las entrevistas al Jefe González al poco tiempo de asumir. Es que integrante del Comando Jefaturial anterior, habían dado la orden en las comisarías, de no registrar aquellos hechos delictivos que tuvieran que ver con la pérdida de la propiedad y cuyo monto fuera inferior a $ 5.000, es decir que prácticamente si al ciudadano lo robaban o rapiñaban por un valor menor a esa cifra en las cifras policiales de Soriano, por orden de determinado integrante del Comando no se registraba, es como que no había existido. Y eso inmediatamente quedó sin efecto, porque el propio Jefe González fue consultado si seguían con ese criterio y la reacción fue primero de sorpresa y luego de registrar absolutamente todo, inclusive cambiando un concepto que también a su criterio difiere de otros jerarcas, incluso ministeriales. Para el Jefe de Policía muchas veces se disfraza la rapiña como arrebato y él fue claro que acá no existe el arrebato, son todas rapiñas y ya sea por "unos chizitos" como existió, como por dinero en una empresa, es decir que el monto no era motivo para establecer si se registraba o no, todos los hechos debían registrarse.
En cuanto a los abigeatos vamos a tomar las denuncias de los últimos tres años, y en ese sentido en el 2017 se registraron 115 denuncias, en el 2018 fueron 118 y el 2019 acaba de cerrar con un descenso en la cantidad de denuncias, ubicándolas en 92.
También se registró descenso, en el cierre del 2019, en lo que refiere al delito de daños en cuanto a la cantidad de denuncias realizas, ya que en el 2017 se ubicaban en 367, en el 2018 habían crecido a 410 y en el año recientemente finalizado fueron 334.
Respecto de los homicidios ocurridos en los últimos tres años, en el 2017 hubo 5 muertes violentas, en el 2018 fueron 7 y al cierre del 2019 se registraron 4 homicidios.
Como se ve en estos números, el 2019 cerró a nivel de la Administración de la Jefatura de Policía de Soriano, bajo la conducción del Crio. Gral. (r) Alberto González, con todos los delitos a la baja y en el período en que está al frente de la Jefatura, que en marzo se cumplirían los 4 años, las cifras han mejorado o a diferencia de lo que ocurre a nivel país, no empeoraron y ello tiene un mérito, eso tiene que ver con gestión, porque Soriano no es una isla en materia de delincuencia y menos teniendo una Unidad del INR como la 24 que dejó de ser la de aquella original de la población reclusa regional para convertirse en receptora de delincuentes de todo el país y muchas veces con perfiles no adecuados para una unidad de media seguridad, con las repercusiones que quienes seguimos el tema policial, hemos apreciado en la participación en los hechos delictivos locales.

CAPITULO APARTE PARA EL COMBATE A LAS DROGAS
En este caso y continuando con algo que poco antes del relevo el entonces Jefe Ayuto había tomado como decisión que la Brigada Departamental Antidrogas dependiera directamente del Jefe, González mantuvo y fortaleció esa directiva, y los resultados quedaron a la vista. Recuperándose la credibilidad por parte de la ciudadanía a la hora de denunciar, con significativa cantidad de personas procesadas con prisión y algunas menos sin (por el Código viejo) y también condenados con el nuevo CPP, cerrando decenas de bocas de venta, contándose para ello con el trabajo de Inteligencia policial, pero también con el apoyo de la propia gente que al recuperar la confianza en la Policía brindó información y tuvo su respuesta con el accionar de la BDA.
Durante la gestión de González, con el mismo director de la BDA, se cerraron 93 bocas, se procesaron y/o condenaron 182 personas, la cocaína incautada fue de 14,366 kg, la pasta base 4,641 kg, la marihuana 12,208 kg más 217 plantas, además de 24 armas, 20 autos, 8 motos, $ 743.735 y US$ 9.807.
Con el cierre de gestión en esa intervención en el caso más relevante de la historia del país en materia de la incautación del mayor cargamento de estupefacientes en Uruguay. Logrando que en la noche con una guardia en la noche en el campo del principal involucrado, evitar que se trasladara la tolva con alrededor de 1.400 kilos de cocaína del campo de Murialdo a otro, lo que permitió reforzar las pruebas a nivel de Fiscalía, dejando en evidencia el lugar de carga y depósito de la sustancia y también el involucramiento de otras personas.

EN QUE CONTEXTO SE DIO ESTA GESTION
Para evaluar la gestión es muy importante tener presente el apoyo recibido y en ese sentido debemos ser concretos, en estos casi cuatro años de labor del Jefe González al frente de la Jefatura de Soriano, es de las pocas con múltiples promesas incumplidas en cuanto a la colocación de las cámaras de seguridad, sólo basta hacer un seguimiento a través de las páginas de @gesor para ver las veces que se prometió y todavía sigue sin cumplirse con esta herramienta que sin dudas es un valioso apoyo para combatir el delito.
En cuatro años no creemos tener temor en equivocarnos si decimos que de la flota vehicular cambiaron siete u ocho vehículos, y al menos cinco de ellos tras una visita personal del propio Ministro Bonomi el año pasado, sorprendido que nunca había sido tenido en cuenta Soriano en un cambio de flota.
La falta de oficiales de rango, con seccionales a cargo de personal subalterno sin el grado que debiera tener para estar al frente de una comisaría pero que igualmente se esfuerzan y dan todo de sí, pero que no tienen la jerarquía (funcional) que corresponde para desempeñar esos cargos y a lo largo de la gestión los pedidos han sido reiterados, las respuestas, mínimas, alguna reciente con el envío de cuatro, a los que a su vez hay que "foguearlos" en el día a día, en la realidad, porque vienen de otras funciones en Montevideo.
Con la falta de personal subalterno -como en la mayor parte del país- con destacamentos o seccionales de localidades o pueblos del Interior que deben cerrarse cuando el único policía sale a cumplir una diligencia, otras sin siquiera un funcionario, con turnos en comisarías de las principales ciudades con cuatro, tres y hasta dos funcionarios para atender lo que ocurra en esas ocho horas.
Es decir que más allá de aspectos relevantes como mejoras salariales para los funcionarios, combustibles para que los móviles circulen, uniformes acordes, etc, hay otros fundamentales para la gestión de la seguridad y el orden que no tuvieron el respaldo necesario, sin embargo, la gestión se cumplió y los números la favorecen.
Por eso es que entendemos, y es una valloración que hacemos teniendo en cuenta los años que desde la población recibimos la preocupación y las quejas contínuas para encontrar un Jefe de Policía que lograra, primero restaurar la confianza de la ciudadanía en la Policía, hoy eso ha mejorado sustancialmente luego de estar muy dañada, la gente cree, va, denuncia, muchos inclusive directamente con el Jefe que tiene esa otra particularidad de recibir a todos los vecinos en su despacho, cosa que antes no se veía. Un Jefe que a diferentes horas del día y en particular de la noche sale a recorrer a pie distintas zonas y marca las posibles falencias que haya en el servicio a los jefes de día. Un Jefe que ha humanizado el trato con el funcionario, que lo respeta, que lo considera un par y como tal lo atiende cuando lo requiere, sin marcar la distancia que otros anteriores establecieron. Alguien que trabaja en silencio, con bajo perfil, dispuesto a atender a los medios siempre, pero sin la desesperación de otros por aparecer, todo lo contrario, dando participación al resto del Comando y a los encargados de cada área específica para que pueda hacer conocer su labor.
Sin dudas que hay cosas para mejorar, pero se está en el camino, y ahora esta responsabilidad pasa para quien estará a cargo de la Jefatura, William Martínez, un hombre que si bien no es nativo de Soriano sí hizo la mayor parte de su carrera en este departamento, viene dejando el cargo de Jefe de san José y con la responsabilidad de tener que ser profeta en su tierra y ello no será sencillo. Tiene sus cualidades para estar donde está pero la vara quedó alta después de mucho tiempo y de su trabajo dependerá el poder mantenerla y si es posible superarla.
Para el Jefe González, el deseo de éxitos en su nuevo destino y el agradecimiento por lo realizado y por el trato dispensado desde lo laboral y también en lo humano.