María Noel Taranto, esa estupenda cantante uruguaya, que desparrama su arte por los grandes escenarios nacionales e internacionales, es alguien muy querida por tierras mercedarias, es que ha estado prácticamente desde el principio acompañando al Movimiento Cultural Jazz a la Calle, muchas veces como invitada para participar del escenario principal, otras como visitante y que para despuntar el vicio y hacer gozar a quienes se sientan al cordón de la vereda o en su silla playera, los hace disfrutar de algunas de sus interpretaciones en los toques callejeros. En los últimos años por razones laborales suyas o de su compañero, alguien también muy apreciado en Mercedes donde vivió varios años, Leo Parragues, no habian podido estar toda la semana del Encuentro Internacional de Músicos Jazz a la Calle y esta vez se les notaba radiantes, felices, porque consiguieron poder venir a disfrutar desde el primer día y se quedarán hasta el final.
Allí y tras ser saludados por toda la gente que la adora, María Noel junto a Leo se sentaron en sus playeras y disfrutaron a pleno de los conciertos de los grupos de la primera noche del encuentro, culminada la primera jornada pudimos con @gesor charlar con esta gran artista y mejor persona que es "la Taranto" como le dicen cariñosamente en el ambiente musical, para que nos dejara sus impresiones de una primera jornada vivida a pleno y cerrada bailando por mucho del público que colmó la Manzana 20.
¿Qué te deja esta primera noche que acaba de terminar?
"Esta primera noche me dejó la emoción que estoy viniendo a la inauguración de Jazz a la Calle, voy a estar hasta el último día, hasta la despedida, es un placer que nos estamos dando con mi amado Leo Parragués, que pudimos venir y estar en cada show, a cada presentación y disfrutar y escuchar todo, conversar con los músicos y la impresión de hoy es que la energía que se vive acá te revive todo, te recompone todo, es como volver a ser niño dentro del jazz, como recuperar todos los sonidos del jazz, todas las variantes, la voz, los instrumentos, es algo difícil de definir no sé si estoy logrando transmitirlo bien, pero es esa alegría de recuperarse como niño escuchando algo por primera vez, como si estuviésemos de limpieza de los vidrios, las ventanas, los oídos y oyendo por primera. Eso es lo que te da un festival porque no sabés exactamente que va a traer cada grupo, que temas prepararon, por lo menos no hice un trabajo de deberes previo porque me gusta que me sorprendan, escuchar un vocalista y decir "mirá que interesante giro", me gusta escuchar a Alejandra Genta y decir "mirá como sonó ese saxo barítono", me gusta conocer La Antofagasta Big Bang, Martín Muguerza con un proyecto interesantísimo, La Carricola una cosa absolutamente adorable. Ya el primer día nos deja absolutamente renovados y listos para todo lo que pueda traer las jam posteriores a las presentaciones y los próximos días. Mucho jazz, mucha vitalidad, buena energía, mucha renovación, mucho reencuentro con los músicos, un placer de hablar contigo y lo que me deja este primer día es muchas ganas de todos los próximos días".
Contame tú que conocés prácticamente desde el inicio este Jazz a la Calle, ¿qué tiene este encuentro que podemos tildar de familiar, visto con ojos que ha estado en grandes escenarios con músicos de primer nivel, ésto de la macomunión de los músicos con el público, de la cercanía del escenario con la gente sentada en la tierra o un sillita playera?
"Y además después bajan del escenario y podés conversar con ellos, es muy disfrutable. Lo que se da aquí difícilmente se dé en otros lados, y hay otras cosas que se dan en otros lados, pero lo que se da aquí que hay niños corriendo y escuchando, gente que sabe mucho de jazz y otra que vino para ver como es, es una linda mezcla cultural, compartiendo entre un montón de gente de los más variados orígenes y gustos, un rato juntos, celebrar algo que estña haciendo el músico, que es único, porque la improvisación y la emoción del momento es única en el jazz, no va a haber otro toque que sea igual, tocará el mismo tema, pero no lo va a tocar igual y todo el mundo percibe eso, algo único, de estar todos juntos en esta especie de comunión, disfrutando, nos enriquece a todos, mentalmente, espiritualmente, musicalmente desde ya".
¿No te dieron ganas de cantar "Bésame mucho" con La Antofagasta y esa interpretación de "Gracias a la Vida" de Violeta Parra, algo no habitual, mostrando un repertorio con temas populares que encantó a la gente?
"Acá en mi sillita me canté todas las canciones y bailé algunas también. Me gustó mucho que hicieran un homenaje a Violeta Parra, me gusta cuando los músicos toman un tema que es improbable para el jazz porque después de todo "Bésame mucho" se ha hecho muchas veces, pero "Gracias a la vida" de Violeta Parra fue muy lindo que tomaran ese tema y que lo lograran porque es algo inesperado, logrando un ambiente jazzístico, una cosa sutil, muy hermosa como lo es el tema, nos dejan algo nuevo, interesante para disfrutar y escuchar".
Y te despediste esta primera noche bailando...
"Absolutamente, nos invitaron a bailar y yo quien soy para negarme, nos veremos cada día, muchísimas gracias...".

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