La Unidad de Cuidados Paliativos del Hospital “Zoilo A. Chelle” de  Mercedes  está  a cargo de  la Dra. Joselina Ibarburu (a  la derecha  de la imagen), quien es acompañada por  la Lic. Andrea Reyes y la enfermera voluntaria  Mariana Moreno (a la izquierda).  Recibe pacientes no solamente de  Mercedes, en el acompañamiento  de  la enfermedad. Un servicio nuevo dentro del Hospital Mercedes y que requiere  tomar conciencia “que la gente tiene derecho a reclamar  por este servicio” comentó la Dra. Ibarburu.

En diálogo con @gesor la Dra. Joselina Ibarburu agregó que  la Unidad de Cuidados Paliativos recibe pacientes “que tienen enfermedades amenazantes para la vida, que deterioran la calidad de vida. Acompañamos en lo espiritual, en lo sicológico  a los pacientes y sus  familias”. Explicando “lo que se trata es el control de síntomas de aquellas enfermedades que limitan y empeoran la calidad de vida”.

La medicina tracidicional afrontaba estos temas desde el dolor y del abordaje médico, pero no con un acompañamiento integral. ¿Eso es lo que se persigue en la Unidad de Cuidados Paliativos?

-Exactamente.  La  medicina tradicional lo que hace es abocarse al alivio  físico sobre todo pero se le suman otras cosas como es el acompañamiento  sicológico y espiritual del paciente y la familia.

¿Y la familia con qué  inquietudes viene  solicitando el servicio?

-“Surgen varias interrogantes. Muchas veces si hablar o no de la enfermedad que les toca atravesar, si hablar de ese diagnóstico.

No se obliga  los familiares a decirle nada al paciente, simplemente el paciente ya lo sabe, va  a preguntar lo que quiere saber   en su momento. La verdad es la verdad tolerable.  La verdad que el  paciente  quiera saber, cuando él lo quiera saber.

Por eso, poder acompañar  en ese sentido, pero esa  es una de las cosas que más inquieta.  A  veces no hay que decir nada, sino habilitar a que puedan expresar  lo que sienten y compartir”.

Me  supongo que como  profesional de la medicina significa un desafío  doble porque más allá de lo estrictamente médico pasa por el tema humano y otros aspectos en los cuales  capaz que la Facultad  no  los ha formado.

-“Ni qué hablar. Si bien ahora, desde hace uno o dos años la Facultad  empieza  a formar en Cuidados Paliativos.

Es un desafío.  En lo personal Cuidados Paliativos ha sido  un desafío  porque esto habla de cierta apertura que hay que tener. Hay que salir un poco de la Medicina que nos enseñaron en Facultad  y que después hay que buscar recursos por otros  lados. Recursos emocionales y espirituales que por ahí  no los teníamos”.

¿Qué proyecciones tiene este sector del Hospital Mercedes para los próximos años?

-“Desde que empezamos hemos sido muy ambiciosos para los recursos que tenemos, pero la idea que esto sea accesible, haya universalidad en el acceso  a Cuidados Paliativos en todo el departamento. Ya sea en lo público o en lo privado.

Para nosotros es tener más recursos humanos, si bien hay gente que tiene un perfil para poder acompañar, el recurso humano no solamente debe estar formado, sino tener esa cosa innata de empatía y de presencia. Pero además ese recurso humano debe ser valorado. Esto es un trabajo, nosotros trabajamos de esto y debe ser remunerado como corresponde.

Está muy bien, nosotros recibimos mucha compensación por lo que hacemos, y no pasa justamente por lo material, pero quisiera que mis colaboradores  recibiera su remuneración justa”.