Debido a un estado gripal, el Edil Heber Scirgalea no pudo concurrir a la sesión de reconocimiento al Batallón "Asencio" de Infantería N° 5 por parte de la Junta Departamental de Soriano, por la tarea desarrollada en apoyo a la población apenas ocurrido el tornado y durante la reconstrucción de Dolores.
Ante dicha ausencia, la Edila Nilda Costa dio lectura a la exposición preparada por Scirgalea sobre este reconocimiento.

"Gracias señor presidente.

Buenas noches a quienes no visitan y son hoy los homenajeados.

 En estos casos, cuando hacemos un reconocimiento de esta magnitud lamentablemente y por razones lógicas  no podemos contar con la totalidad de los involucrados, pero sabemos que quienes los representan les informarán de lo vivido esta noche de Sesión Extraordinaria.

No me extraña que nuevamente se resalte  y se reconozca al Batallón de Infantería No. 5 por lo que ha aportado a nuestra sociedad, en este caso la Catástrofe de Dolores, como en otras que ha sido convocado para el cumplimiento de  tareas comunitarias.

No estamos acostumbrados a eventos adversos de esta naturaleza y por esa razón no se cuenta en nuestra zona con grupos preparados para enfrentarlas, digo más, no sé  si los hay en nuestro país.

Quien habla puede decir con total propiedad que esta Unidad Militar se ha caracterizado desde su creación, por contar con grandes  hombres dentro de sus filas, con sentimiento profundo del espíritu de cuerpo y espíritu militar, subordinación, responsabilidad, carácter e iniciativa; prestigio ganado en esferas castrenses por el triunfo  en competencias internas regionales (desconozco si hoy se llevan a cabo ) y actuaciones muy importantes en lo que son las Misiones de Paz donde nuestro país tiene militares desplegados en el mundo.

Por conversaciones que hemos mantenido, pude tomar conocimiento que en la desgraciada tarde del 15 de abril de 2016, sobre las 16.45 el señor Jefe de Batallón del momento Tte. Cnel. Jorge Laquintana, quien está presente y vaya mi especial saludo por la amistad y aprecio que nos une, recibe llamada telefónica de parte del Coordinador del Centro de Emergencia Departamental Sr. Andrés Magnone, el cual con la información fragmentaria que contaba en un primer momento la  trasmite lo sucedido, solicitando apoyo en primera instancia con quince soldados, lo que fue duplicado a los pocos minutos.

Mientras se preparaba el apoyo desde el Bn. el Comandante Laquintana puso en conocimiento de lo fragmentario de la información que poseía al Señor Comandante de Brigada de Infantería N.2 con asiento en la ciudad de Colonia Coronel Gustavo Figueredo, diciéndole además que salía de inmediato para Dolores, estando en tiempo record, algo de quince minutos le llevó llegar al lugar, llegando sobre las 17.00 horas el primer contingente del Batallón.

Una vez pasado el evento, cumplieron un rol importante los programas de radios que esos horarios se emitían, dando detalles de lo que estaba ocurriendo, lo que permitió tomar conocimiento de la magnitud de la tragedia porque recordarán que debido a la caída de la torre de Antel, solo se contaba con la comunicación de Movistar., estando restringidas las comunicaciones.

Dentro de los hechos a destacar tenemos que decir que el Segundo Jefe de Unidad estando en el Bn. daba la sensación que intuía el pensamiento de su Comandante, por ejemplo cuando éste le solicita que fuera preparando la ambulancia, la respuesta del Mayor Beloqui fue está pronta y sale con ese destino y así sucesivamente se fue brindando el apoyo que tenía disponible esta unidad militar.

No cabe objeción alguna  ni cuestionamientos sobre lo actuado y las órdenes impartidas por el Comando de Bn., demostrando sentido común e iniciativa en esos momentos muy difíciles donde las decisiones  y las ordenes tenían que darlas en el momento oportuno y con la claridad necesaria que les permitiera a sus subordinados interpretar el espíritu y objetivo de la misma para su cumplimiento.

Hay muchas cosas para destacar de la actuación del Batallón de Infantería No.5 en esta Emergencia, desde esa tarde de abril hasta el 31 de enero de 2017 , se cumplieron 44.332 horas hombres, con la salvedad que se dividió la operación en tres etapas, la  primera etapa donde se tuvo la mayor concentración de personal con 100 efectivos, que si no recuerdo mal fueron las primeras dos semanas, luego hasta fines del mes de agosto con 60 efectivos y la tercera etapa hasta el 31 de enero de 2017 con 40 efectivos.

Cuando me refiero al personal empleado y me refiero a los  60 efectivos, corresponde decir que 30 personas se encontraban desplegadas en el operativo y 30  personas se encontraban de retén.

Otro aspecto a considerar es la confección de rancho que se hizo, es decir las comidas. En la primera etapa siendo inicialmente una vez sucedido el tornado 5.250 plazas de comida, en la segunda etapa 19.750 y en la tercera 23.760, básicamente se tenían cocinas de campaña desplegadas en la ciudad de Dolores y esa alimentación se confeccionaba para el personas desplegado acorde a la etapa y para aquellos que eran determinado por el CECOED que necesitaban ser abastecidos de comidas.

Otro de los aspectos a destacar es el espíritu de cuerpo de los efectivos que conforman esta Unidad Militar, espíritu de cuerpo y solidaridad. El Personal Subalterno una vez enterado del acontecimiento se presentó en la Unidad de inmediato para su disponibilidad en el evento y por esa razón merece un respetuoso comentario.  El SOLDADO no es mejor ni peor que nadie, pero es diferente a los demás, se preparación es en base al sacrificio para enfrentar situaciones adversas de toda naturaleza, lo hace en forma entusiasta, cuidadosa y ejemplar para el mejor cumplimiento de su misión, con el respeto y subordinación que merecen sus superiores, disciplina que es fraternal y digna; en muchos casos para el cumplimiento de sus obligaciones se ven impedidos de estar con su familia. Sabemos que sus sueldos son insuficientes para colmar las necesidades básicas de sus familias y por esa razón no tienen otra opción que trabajar fuera de hora, pero esta desgracia que ocurrió en Dolores nos lleva a ver una realidad que muchas veces  no se quiere ver. La solidaridad puesta en Dolores, tuvo contrapartida negativa ,  a consta del sacrificio de sus propias familias ,porque durante el tiempo que estuvieron destacados en dicha ciudad no contaron con la changa que les permitía llevar unos pesos para palear la olla de la familia y muchos se olvidan que el soldado no está sindicalizado para que lo protejan,  no tiene el beneficio del salario vacacional, licencias impagas, tampoco contaron con tiquet de alimentación, no tienen un primero de mayo, como tampoco pudieron estar con su familia en las fiestas tradicionales, por eso digo  EL SOLDADO ES DIFERENTE A LOS DEMAS Y LLEVA EL SENTIMIENTO DE SOLIDARIDAD EN EL ALMA, y es quien hoy tiene mayor aprobación y ningún cuestionamiento en sus actos porque sirven a los demás y tienen claro que sirviendo a los demás, defienden su patria a consta de cualquier sacrificio.

Otro destaque que no es poco, es que esta Unidad Militar cumplió con sus propios recursos materiales y humanos en el desempeño  de su operación en esta instancia, no siendo necesaria la participación de otras Unidades,  pasando a ser  su insignia patrimonio de todos los Doloreños.

Terminando señor presidente, no quiero dejar de mencionar a quienes respaldaron el accionar desde el primer momento y hasta el final al Comando de Batallón y sus Subordinados, a quienes también vimos desde los primeros momentos en pleno Centro de Operaciones, quienes por naturaleza y razones de mando no pueden pasar desapercibidos y aportaron para el fiel cumplimiento, me refiero el señor Comandante de la Brigada de Infantería No.2, quien también supo ser Jefe de esta Unidad el Coronel Gustavo Figueredo ,al señor Comandante de la División de Ejército II  General Carlos Loitey y vaya si será casualidad, oriundo de la ciudad de Dolores, cumpliendo en la actualidad misión en el exterior, por lo que solicito les llegue  versión taquigráfica de esta sesión, como también sea remitida a los Señores Comandantes de la Brigada de Infantería No.2, de la División Ejército II y al Señor Comandante en Jefe del Ejército .

Aquí en este recinto le solicito al Señor Jefe de Batallón, pueda hacer llegar a sus integrantes la  versión taquigráfica de mis palabras,  orgulloso estoy  por haber pertenecido a esta Unidad, sintiéndome representado por quienes hoy la conforman y agradecido estoy por las tareas que llevan adelante con ese sentimiento humanitario que los caracteriza".

Heber Scirgalea.

Lista 903.

Edil Partido Nacional.