Dos de nuestros periodistas vieron tal cual ocurrieron las cosas, siendo testigos de lo que pasó. Justo estábamos cubriendo lo del copamiento cuando observamos claramente lo que pasaba lo que despertó la persecución policial que fue a través de tres móviles. Nadie nos contó nada, estaría bueno que reflexionen antes de defender lo indefendible. Después los padres lloran sobre los cajones de los hijos. Muchas Gracias.