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Facundo Ferreira había sido uno de los pilares del plantel de Independiente que obtuviera el título de campeón de la temporada 2013-2014, bajo la conducción de Atilio Invernizzi, coronando aquella campaña con una brillante actuación frente a Remeros, en la quinta y última final del Torneo Competencia. Para muchos había sido, sin dudas, el mejor jugador del campeonato ganado por los rojos de Calle Sánchez. En el 2014, al iniciarse esta nueva temporada que acaba de culminar este fin de semana con el título en favor de Pacaembú, el rubio y espigado jugador se incorporó a Remeros, en una transferencia que diera mucho de qué hablar. El certamen se puso en marcha y avanzó hacia sus etapas decisivas, pero los costeros no consiguieron su objetivo de entrar en las semifinales, comenzando a especularse entonces sobre el futuro inmediato y el equipo que pasaría a reforzar Ferreira. Lo fue a buscar Racing, pero el jugador, que estaba lesionado, pretendía recuperarse. Quien sí pasó a los académicos fue el tacuaremboense Johnny Rodríguez. Finalmente Ferreira llegó a un acuerdo con Pacaembú, convirtiéndose en unos de los elementos claves que tuvo el Director Técnico Jorge Cremella para cerrar el campeonato de la mejor forma que podía hacerlo, es decir conquistando el título de campeón. En el último partido final, este sábado, en el “Bellini”, Facundo se llenó rápido de faltas personales y el entrenador debió reservarlo en el banco de suplentes. Cuando retornó al rectángulo,fue otra vez protagonista.
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